La pandemia obligó a varias compañía a descentralizar sus procesos y empezar a usar la nube, algunos sectores como ventas, finanzas, recursos humanos, cadenas de suministro o marketing —por mencionar algunas— aceleraron este camino para empezar a realizar los procesos de forma remota.
Algunos de los beneficios de migrar a la nube son la mejora en la toma de decisiones, la disminución de tiempo en procesos y la optimización de las operaciones.
Para ir más lento, te explicaremos qué es y cómo puedes llegar a ella junto a tu compañía.
Según el blog de Microsoft, la nube es una red enorme que sirve para almacenar y administrar datos, así como ejecutar aplicaciones o entregar contenidos como el streaming, correos, software o medios sociales.
En otras palabras, la información no solo se mantiene en un lugar, esta se mantiene arriba en una red y puedes acceder a ella desde cualquier dispositivo que tenga conexión a internet.
«La información esta disponible dondequiera que vaya o siempre que lo necesite», se lee en el blog de Microsoft.
Cómo lo mencionamos un poco más arriba, los beneficios de usar la nube dentro de una compañía van desde una mayor agilidad, mayor innovación y menores costos, según el blog la compañía SAS.
Mayor agilidad: La empresa puede responder con mayor rapidez a cualquier problema y aumenta o reduce las capacidades analíticas.
Mayor innovación: La nube permite que se pueda compartir de una forma más eficaz el conocimiento y nuevas habilidades entre los grupos dentro de la compañía.
Menores costos: El costo de subir las operaciones a la nube se reducen debido al cambio de infraestructura de mantenerlo al interior de la empresa.
Además, se puede tener acceso al machine learning y la inteligencia artificial, gracias al procesamiento de los datos dando innovación a las necesidades de cada compañía.
Las compañías tienen principalmente tres modelos de almacenamiento:
Nube privada: La empresa tiene más control sobre los datos y está protegido detrás de un firewall. Esta es exclusivamente para el uso de esa organización y es a través de una red propia.
Nube Pública: Este almacenamiento es ideal para datos no estructurados y son propiedad de proveedores, además cuenta con la infraestructura y software para mantener la nube.
Nube Híbrida: Combina el almacenamiento público y privado para tener más flexibilidad.
Si decides tener cualquier tipo almacenamiento, los proveedores deben asegurar que todos los datos no serán robados.
Además, en tiempos de pandemia es importante que tu empresa pueda moverse al mismo ritmo que las conexiones actuales.
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