Nvidia anunció que fabricará un procesador de CPU basado en tecnología de Arm, lo que la coloca en competencia más directa con Intel.
La compañ dijo que el procesador «Grace», que se lanzará en 2023, está diseñado para manejar tareas como entrenar algoritmos de inteligencia artificial (IA).
«El resultado de más de 10,000 años de trabajo de ingeniería, el NVIDIA Grace está diseñado para abordar los requisitos informáticos de las aplicaciones más avanzadas del mundo, incluido el procesamiento del lenguaje natural, los sistemas de recomendación y la supercomputación de IA», dijo Nvidia en un comunicado.
Con su procesador «Grace», Nvidia será la compañía de chips más grande hasta ahora en desafiar a Intel en su mercado clave.
Intel es el mayor fabricante mundial de procesadores centrales para servidores de centros de datos; sin embargo, ha visto una competencia cada vez mayor de los chips de Arm.
La tecnología de Arm está detrás de los chips de la mayoría de los smartphones; sin embargo, durante los últimos años se ha abierto camino en los centros de datos.
Nvidia dijo en septiembre que comprará Arm por 40,000 millones de dólares, pero sus rivales han expresado preocupación de que la compañía acceda a las tecnologías de Arm.
Los chips de Nvidia se han utilizado tradicionalmente como «aceleradores» junto con los procesadores centrales existentes de Intel, Advanced Micro Devices Inc u otros, acelerando el sistema informático en general.
En un discurso para anunciar el chip, el CEO de Nvidia, Jensen Huang, calificó al nuevo chip de servidor como la «pieza final del rompecabezas» que unirá los chips gráficos y de red de Nvidia.
Al fabricar su propio procesador central, Nvidia se enfrenta a Intel y AMD directamente por primera vez. Las acciones de Nvidia subieron hasta un 4% después de la noticia, mientras que las de Intel y AMD cayeron alrededor de un 4%.
Alguna vez conocida por sus chips gráficos (GPUs) para mejorar los videojuegos, Nvidia se ha centrado en gran medida en la inteligencia artificial en los últimos años. Esto ha ayudado a que su capitalización de mercado supere la de Intel para convertirse en la mayor empresa de semiconductores de Estados Unidos.
Con información de Reuters.
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