El verdadero problema de McDonald’s no es la cajita feliz, según expertos
- McDonald’s se comprometió a eliminar gradualmente el uso de plásticos de combustibles fósiles con los que fabrica sus juguetes.
- La compañía tiene la intención de usar más papel y plásticos reciclables.
- Sin embargo, los expertos dudan que esta medida marque una diferencia real para el medio ambiente.
McDonald’s se comprometió a eliminar gradualmente el uso de plásticos a base de combustibles fósiles con los que fabrica los juguetes que vienen en su Cajita Feliz para finales de 2025.
Sin embargo, los expertos dicen que esta medida no marcará una diferencia real en favor del medio ambiente.
El gigante de la comida rápida hizo el anuncio el pasado 21 de septiembre. Esto significa que los niños podrán ver cómo los 1,000 millones de juguetes que distribuye cada año se convertirán en figuras de papel en 3D; o juguetes hechos de plástico reciclado o materiales derivados de plantas.
¿Cómo impactará que McDonald’s deje de usar plástico en los juguetes de su Cajita Feliz?
En su anuncio, la compañía dijo que su compromiso podría dar como resultado una reducción de 90% de todo el consumo de plástico a base de combustibles fósiles que hace para sus juguetes. Esto en comparación con el consumo total que realizó en 2018.
Los beneficios generados por este cambio equivaldrían a que cerca de 700,000 personas abandonen el uso del plástico durante un año, según los cálculos de la firma.
“Nuestra próxima generación de clientes se preocupa profundamente por proteger el planeta y por lo que podemos hacer para ayudar a que nuestro negocio sea más sustentable”, dijo en un comunicado de prensa la directora de sostenibilidad de McDonald’s, Jenny McColloch.
McDonald’s presentó por primera vez la Cajita Feliz en 1979, pero sus clientes han presionado en los últimos años para que la empresa sea más respetuosa con el medio ambiente.
Por ejemplo, dos niñas británicas de nueve y siete años iniciaron una petición en 2019 para pedir a McDonald’s y Burger King que dejaran de distribuir juguetes de plástico. Su reclamo consiguió el apoyo de más de 500,000 firmas.
Actualmente, los juguetes que vienen con las comidas en el Reino Unido e Irlanda no utilizan plásticos no renovables en su fabricación. Las Cajitas Felicies francesas ya no vienen con juguetes de plástico; y en Estados Unidos, McDonald’s lanzó algunas opciones de productos de papel, como libros y cartas de Pokemon.
Los expertos medioambientales dicen que McDonald’s puede hacer más
Frente a los nuevos compromisos anunciados por la empresa, los expertos ambientales se preguntan si la promesa de McDonald’s marcará una diferencia real para el medio ambiente.
Sharon Seah, investigadora en asuntos de cambio climático en el Centro de Estudios de la ASEAN del Instituto ISEAS-Yusof Ishak de Singapur, dijo que si bien McDonald’s dio un paso “alentador”, es solo una pequeña muestra de cómo las grandes corporaciones pueden tomar acciones más sostenibles.
“Dado que McDonald’s es una de las marcas de franquicias más grandes del mundo, puede hacer más en otras de sus operaciones, como reducir su huella de carbono si cambia sus productos a través de las cadenas de suministro”, dijo Seah.
La reducción de plásticos en las Cajitas Felices es simplemente “arañar la superficie” del problema real, agregó la experta.
“En general, el ciclo de vida de los juguetes aún está muy mal administrado. El plástico sigue siendo plástico y no es una opción suficientemente biodegradable. Y aún usando el papel, la pulpa requerida para crear estos productos sigue siendo un recurso que se está empleando para hacer los juguetes”, dijo Seah.
McDonald’s debería reducir el uso de carne de res
Según Seah, McDonald’s podría ofrecer más opciones veganas, o aventurarse a ofrecer carne de origen vegetal en sus comidas para compensar su consumo de carne.
Se estima que McDonald’s vende más de 4,000 millones de kilogramos de carne de res en Estados Unidos cada año.
La propia empresa reconoció que la producción de carne de res es una fuente significativa de sus emisiones de gases de efecto invernadero. También admitió que la huella de carbono de su producción de carne vacuna en el Reino Unido podría reducirse.
Según el Centro de Sistemas Sostenibles de la Universidad de Michigan, la cría de ganado, ovejas y cabras produjo 178 millones de toneladas métricas de gases de efecto invernadero en 2018. Más de 2.7 kilos de carbono se generan por cada porción de carne de res producida.
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FGO) también proyectó en un estudio de 2013 que si las vacas fueran un solo país, serían el tercer mayor emisor de gases de efecto invernadero del mundo.
Stephanie Feldstein, directora de población y sostenibilidad de la organización sin fines de lucro Center for Biological Diversity, también criticó en Twitter a McDonald’s por el uso excesivo de carne de res.
“McDonald’s sirve miles de millones de hamburguesas al año, con enormes consecuencias para nuestro clima”, dijo Feldstein.
“Aunque McDonald’s realmente quiere crear un cambio sostenible, no puede limitarse a quitar el plástico de sus juguetes. La empresa necesita renovar su menú, poner McPlant en todos los restaurantes y reducir la cantidad de carne que sirve”, sentenció.
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