La institución de fondeo colectivo Prestadero obtuvo de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) —junto con el Comité Interinstitucional donde participan la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y el Banco de México—, recibió autorización como primera comunidad de préstamos entre personas en internet en México. Desde el 23 de junio de 2021 opera como Institución de Financiamiento Colectivo (IFC).
Desde 2012, Prestadero fue pionera en financiamiento colectivo en el país —o crowdfunding—, contó en entrevista su fundador y director general, Gerardo Obregón. “En ese entonces no existía un marco regulatorio específico para el financiamiento colectivo. Sin embargo, operábamos bajo el marco regulatorio de ese momento”.
El desarrollo de las empresas que usan tecnología para brindar servicios financieros —o industria fintech— rebasó a la regulación que tuvo que acelerar abordar rápidamente el desafío. Actualmente, México cuenta con una ley fintech que se considera pionera en la región y entró en vigencia en 2018.
“La autorización nos permitirá seguir creciendo nuestro negocio (…) también es un potencial detonador para recibir inversión extranjera en el negocio, al tener el aval de estar autorizados y así disminuir considerablemente los riesgos regulatorios”, explicó Obregón.
Alrededor de 441 fintechs ofrecen sus servicios de préstamos, financiamiento a empresas, pagos electrónicos y otros, según datos de Finnovista y Endeavor que recuperó Startupeable.
Una gran ventaja de las fintech se notó durante el pico más alto de la pandemia, cuando por medidas de higiene se mantuvo el confinamiento. Entonces, las personas podían realizar trámites bancarios como solicitar créditos a través de su celular.
“Damos créditos personales sin avales y sin garantías por montos de hasta 300,000 pesos y tasas que empiezan en 8.9% anual. Es uno de los grandes diferenciadores de nuestra fintech”, contó Obregón en entrevista con Expertos en Línea.
Cuando comenzó a operar, Obregón recuerda que la gente no creía en el crédito online. “Tuvimos que educar a la gente”, señaló. Entonces, sus principales obstáculos fueron el desconocimiento de las personas respecto a los préstamos en línea. “Como las tasas eran muy atractivas, creían que era un fraude. Por ello, conozco a los primeros inversionistas de la plataforma, creo que de 100, 95 fueron amigos y familiares”, dijo.
Con casi 10 años de operación, Prestadero ha recibido solicitudes por más 7,900 millones de pesos (mdp) y liberado más de 570 mdp en créditos. Hasta ahora, esta fintech tiene más de 500,000 usuarios registrados y arriba de 12,200 inversionistas activos.
“Ahora, como una entidad regulada creo que el mercado ya sabe qué son las fintech y en vez de ir con una institución de tabique, con la financiera de la esquina, pueden hacer sus operaciones en línea con mejores condiciones”, contó Obregón.
Para este año, Prestadero lanzará un nuevo método de perfilamiento crediticio. Este permitirá mostrar ofertas de crédito colocando una mínima cantidad de datos, por lo que estima la liberación de entre 150 y 280 mdp.
Además, Obregón espera que “el mercado de crédito migrará a ser 100% online” en el futuro. Y este crecerá a partir de 2021, impulsado por las fintech, estima el directivo.
Aproximadamente, 40% de los créditos aprobados en Prestadero provienen de clientes ya existentes. Es decir, de clientes que ya tuvieron un crédito con esa fintech; o que son inversionistas pero que ahora buscan crédito. Así, las fintech como esta siguen sumando nuevos clientes.
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