La fintech de origen brasileño Creditas es el unicornio más reciente de América Latina, luego de alcanzar una valoración de 1,750 millones es su ronda de inversión de diciembre.
Con la llegada a México en 2020, la fintech quiere convertirse en el referente digital para las personas en cuestión de servicios de créditos.
Sergio Furio, fundador y CEO de Creditas, lanzó la firma en 2012, tras detectar un nicho dentro del mercado brasileño, lugar al llegó gracias a su esposa.
El empresario contaba ya con experiencias en consultoría estratégica de bancos y con la transformación tecnológica de BBVA en el país.
Furio reconoció que la educación financiera en América Latina es muy diferente a la de Estados Unidos y, por supuesto, a la de su país de origen, España.
Por lo que, la fintech buscaba la inclusión financiera y ofrecer una solución a los socios, como llama el CEO a sus clientes.
«Me di cuenta que había una deficiencia muy grande en Latinoamérica. Brasil y México son mercados con baja penetración de crédito, precios altos y bajas tasas de aprobación», dijo Furio.
Este nicho era el ideal para arrancar la plataforma 100% digital de créditos en línea. Tan solo en Brasil recibieron, desde su colocación, 4 millones de solicitudes de crédito y en México esperan ofrecer los mismos productos.
La soluciones financieras de Creditas están de la mano a la reinvención de un modelo de negocios, como menciona Furio. «Una fintech no es digitalizar», sostuvo.
«La inclusión financiera viene acompañado de dos cosas: por un lado, el aumento del acceso a un crédito de calidad», y es que hoy en día los mexicanos que con préstamos no llegan al 20%, aclara.
«Por otro lado, una reducción del coste de la deuda de las familias, de lo que tienen que pagar de su presupuesto familiar», agregó.
Y bajo esta premisa, la compañía ofrece soluciones crediticias con préstamos con garantía inmobiliaria, garantía de vehículo, financiamiento automotriz y los préstamos de nómina.
«Quería una compañía de tecnología centrada en servicios financieros u con un objetivo muy claro de utilizar los activos de las personas: su casa, su carro, su salario, como una forma de abaratar el coste de la deuda», dijo.
Además, Furio destaca que contra todo pronóstico la fintech creció en 2020, alcanzando el doble de su tamaño, aspectos que fueron reconocidos por los inversionistas que apostaron por la compañía 250 millones de dólares.
«En México, los primeros préstamos empezaron a salir en julio de 2020, con lo cual ya tenemos 7 meses de historia. Pero estamos entusiasmados, todas las tesis que teníamos se confirman», aclaró.
Desde su llegada al país, el capital humano se extendió hasta 70 empleados y esperan que este 2021 crezca a 200 personas, «sin ellos no hay capital económico».
«Necesitamos gente que tenga una mentalidad abierta que tenga las ganas de aprender permanentemente y nos gusta mucho el talento que quiere crecer y se sepa adaptar», concluyó.
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