Boeing dijo este martes que reducirá su tasa de producción del modelo 787. Esto se debe a que trabaja en un nuevo defecto estructural relacionado con la fabricación de sus aviones de dos pasillos.
Ahora, la compañía pronostica que entregará menos de la mitad del centenar de 787 que aún quedan en su inventario este año. Mientras, sigue con las inspecciones forenses y las costosas reparaciones para abordar los defectos de calidad en la aeronave.
Aunque Boeing no reveló una nueva tasa de producción para el programa 787, dijo que estaría temporalmente por debajo de la tasa actual de cinco aviones por mes. La noticia se reflejó en las acciones de Boeing, que cayeron 2.3% esta tarde en Europa.
En lo que va de año, la compañía entregó 156 aviones de todo tipo, en comparación con 157 de todo 2020, señaló.
El último problema, que Reuters informó el lunes, involucró brechas donde los componentes se unen en una mampara, dijo la Administración Federal de Aviación (FAA). La agencia dijo el lunes por la noche que Boeing —que detectó el problema— lo arreglará antes de que se entreguen los aviones.
De hecho, los modelos 737 MAX y 787 del fabricante de aviones estadounidense presentan defectos eléctricos y otros problemas desde finales del año pasado. Por ello, la compañía reanudó las entregas del 787 en marzo, después de una pausa de cinco meses.
«Seguiremos tomándonos el tiempo necesario para asegurarnos que los aviones de Boeing cumplan con la más alta calidad antes de la entrega», dijo la firma.
Con información de Reuters.
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